miércoles, 4 de agosto de 2010

Ante la duda, un sueño.


Que te lo cuente la noche, preguntaselo a las estrellas, quizás se lo saques al mar, que te cuenten que su mirada penetra más que una flecha, oh, si, la persona indicada es Cupido, maldito traidor, más bien cabrón, preguntale a él, ¡Perdición, caída y un asalto al corazón! Una noche del 93, todo valió, donde todo empezó, ¡Un zarpazo al corazón!, ¿Le has preguntado? ¿Qué te ha dicho? ¡Dimelo, dimelo de una vez! Empecé a pensar, a entenderlo, trocitos de sospecha, cada frase con sigilo, cada acción tenía intención, ¿Quién pudo ser? Quiero que seas tú, ¡Dimelo, dimelo, confiesa! Tal vez no fuiste... confiesa... Tal vez no existas, cariño, mi vida, criatura de rubí... fue mi imaginación, fue mi ilusión, ¿pero que hay de esas cartas? dejaste huella, busqué, encontré trocitos de sospecha, me dejaste huella, y aunque sea solo un gesto, un guiño, solo un beso, intentalo una vez, deja que te encuentre, ¿Quién pudo ser? Quiero que seas tú, no descansaré, viajaré, vendere mis sonrisas y lo que me quede de vida, lo otro ya me lo gasté, ¡Te encontraré¡... Tal vez no existas, ante la duda, un sueño.

No hay comentarios:

Publicar un comentario